lunes, 4 de marzo de 2013

Mami Mochi, Papi Pochi y MiniMó


Siempre he pensado que la persona con la cual habría de formar un hogar, debería reunir todas las cualidades necesarias para ser la definitiva.

Quizá por la infancia que viví, me hice esa promesa a mi misma [mis padres después de un tormentoso matrimonio del cual nacieron dos hijas tremendas de maravillosas, terminaron divorciándose 14 años después]

Soy tan romántica, que siempre he creído y creo en el amor, en la familia y en el buen corazón de las personas. Pienso también, que es muy importante el respeto hacia tus hijos, tu pareja y quien te rodea, individualmente de que en algún momento la vida quiera que se sigan distintos caminos.

Tal vez en eso pensemos todos, unos más que otros efectivamente, y a esto he de decir que también me planteé tener familia sin pareja en algún momento de mi vida, pero a casi todos nos gustaría que apareciera esa persona que nos acompañase siempre en nuestro trayecto, elegir tener hijos con ella ( y he dicho elegir, porque hay parejas que también elige no tener y es igualmente respetable) y envejecer juntos viendo a nuestra prole ya madurita y feliz y sentados en la terraza de algún bello lugar de retiro ir recordando cuán prósperos fueron nuestros años de juventud.

Segun leí hace algún tiempo, en mi libro favorito de Paulo Coelho, El Alquimista,  "Cuando una persona desea realmente algo, el Universo entero conspira para que pueda realizar su sueño. Basta con aprender a escuchar los dictados de su corazón"

Puede que por ese deseo tan fuerte de crear mi propia familia, el destino quiso desplazarme de mi ciudad natal a 100km de mi familia, separarlo a él de su tierra añorada a ni más ni menos 600km de la suya...eso sí, cada uno por su lado y con relaciones distintas, para ir aprendiendo mientras tanto...pero con un mismo fin, reunirnos a los dos, con el convencimiento mútuo de que ésta vez sería la definitiva y hacerlo en algún lugar de este planeta para dar lo mejor de nosotros mismos: Nuestro amor y el amor por nuestra hija. El corazón nos dijo que esta era la ocasión.

Tuvimos muy claro desde el principio el futuro de nuestra relación, tanto, que a los tres meses ya estabamos viviendo en pareja. A fecha de hoy 1 de marzo de 2013, nuestra relación ha vivido 7 maravillosos años juntos, con nuestros más y nuestros menos, pero siempre luchando por nuestra relación y manteniendo vivo nuestro amor.

No olvidaré nunca la ilusión de nuestros primeros dias viviendo juntos en los que decidimos tres cosas: abrazarnos siempre, siempre, siempre y sobre todo al llegar a casa, darnos besos al doblar las sábanas e intentar hablar después de habernos enfadado...porque también nos enfadamos, no es todo coser y cantar, como en toda buena casa de vecino.
Y si algo teníamos clarísimo fue que, tarde o temprano, decidiríamos ser papás...formar nuestra familia.

Y de nuestra aventura como papás iré llenando las páginas de este blog.

Típicamente, empezamos adoptando un perro. Con nosotros comparte su vida, desde hace ya casi tres años un precioso perrote, un Labrador Retriever,el cuál, se porta fenomenal con la pequeña. De hecho, elegimos la raza conscientemente del futuro como familia que nos esperaba, y acerté de pleno. Es cierto que en casa nos encantan los animales, y que perfectamente podríamos haber tenido cualquier perro, pero en su momento, tomamos esta decisión y lo queríamos a él.
Os preguntaréis por qué Mochi.
Pues bien, nos empezamos a llamar cariñosamente como casi todas las parejas con diminutivos. Porque ante todo, somos una pareja del montón, con todas nuestras normalidades que pueda tener cualquier pareja que conozcais.
El es mi polluelo y yo soy su mochuela...y de ahí viene....Mochi y Pochi
Aunque ahora nos hemos convertido en Papi Pochi, Mami Mochi y MiniMó

Con este blog quiero compartir mis inquietudes como madre, mis dudas y miedos, mis logros y los descubrimientos que he ido haciendo sobre lactancia, sueño, crianza, educación y familia que tanto me están sorprendiendo.... y sobre todo, quiero compartir la alegría de ver crecer a nuestra pequeña y observar cómo ha crecido aún más si cabe, mi amor como esposa de mi querido PapiPochi.
Te lo dedico a ti amore y a nuestra pequeña, por ser esa persona que reune todo lo que necesitaba para ser feliz.
Eres mi complemento directo.
Y a ella, porque si no fuera por ella, no me hubiera llegado la inspiración. Siempre me ha gustado escribir, pero nada me había motivado tanto a hacerlo como el ser madre.

Intentaré redactar lo más amenamente posible y con cierto sentido del humor, las anécdotas que sucedan en mi familia, y lo que de ésta nueva etapa de mi vida estoy aprendiendo, y compartiré con vosotros toda la información que llegue nueva a mis manos para saber vuestros puntos de vista.

Mi nombre es Carmen, y estoy muy ilusionada al empezar la aventura de este blog con todos vosotros, mamás y papás y todo aquel que me quiera leer.

Doy salida a MamiMochi me mima.

No hay comentarios:

Publicar un comentario