jueves, 14 de marzo de 2013

EL TERROR EN LOS OJOS DE AQUELLA NIÑA


Declaro que: NO SOPORTO VER UN NIÑO LLORANDO.

No hay nada más triste que ver un niño que llora sin ser atendido. Creo que es el primer maltrato psicológico que se le pueda hacer a un ser humano.

Lloramos de bebés y niños para sobrevivir, y sin el llanto agudo de ese niño de hace millones de años, la humanidad hoy por hoy, estaría extinguida.

Como relata el pediatra Carlos González en su libro, Bésame mucho, imaginaros dos bebés en la selva. Los dos lloran enérgicamente. Las mamás de los bebés oyen a sus pequeños. También los oyen una manada de leones que merodea cerca de allí. Una acude inmediatamente y la otra termina de recoger la cosecha tranquilamente para después atender a su bebé. ¿Adivináis quién será la cena de la manada?

Todo bebé llora porque necesita algo, porque tiene hambre, sueño, falta de brazos o necesita a su cuidador cerca para que le de seguridad, cariño y amor.
Todo bebé nace con una única herramienta de comunicación, que es el llanto, para transmitir lo que necesita a su cuidador.

Cuando deliberadamente, decidimos no atender el llanto o las necesidades del bebé o niño, estamos trabajando una comunicación no verbal y transmitimos a ese niño o bebé, que no importa en absoluto lo mucho que llore, porque no va a servir para nada.
Les estamos haciendo ver que han venido a un mundo hostil e inseguro, donde él poco importa.
Y si a ésto le añadimos la cantidad de toxinas que es capaz de liberar nuestro cerebro cuando se nos permite llorar por tiempos ilimitados, aunque en un bebé con sólo 3min. es suficiente (Dormir sin Lágrimas, cap 4) dejándonos en un estado de shock y convirtiéndolo en una práctica totalmente NO saludable, ahí es cuando os puedo decir, que sí. Sí es maltrato dejar llorar a un niño.

Hoy he visto el terror en los ojos de una niña.
Lo único que pude hacer fue preguntar a una señora que estaba relajadamente tomando un café enfrente de ella, que además estaba de tertulia entretenida con una amiga, si era su mamá, mientras la niña lloraba horrorizada dentro de un parque lleno de niños jugando y chillando embrutecidamente, en el cual no quería estar sola, sin su mejor amiga. Su madre.

Y sí, efectivamente. Era su mamá.
Pero para ella, no pasaba nada. La niña lloraba porque le apetecía llorar. Estaba acostumbrada a llorar. La niña lloraba porque quería fastidiar el café de mamá. La niña tenía los ojos enrojecidos de llorar porque pretendía hacer chantaje emocional a mamá.
(Eso es lo que pensará ella)

Ante todo, creo que, con sólo la pregunta, ya le dije demasiado. (Aún le hubiera dicho más, pero eso ya es meterme donde no me importa)
¿Por qué no intentamos verlo de otro modo?
Sólo dejando el lado adulto para verlo con ojos de niño, llegaremos a entender que pasaba ahí y cuál era la necesidad de aquella niña.

Nunca me había parado a pensarlo, porque me imaginaba con mi pequeña jugando en ese tipo de parques,  pero yo, seguramente, tampoco hubiera querido estar ahí en la misma situación que aquella niña, rodeada de niños excitados a los cuales parecía que los hubieran dejado ahí como último recurso para agotar las energías. Era como si hubieran abierto la veda para dejar a las criaturas desahogarse cuales vaquillas en un ruedo....Dios mío!! Encima sin conocerlos, porque además, estábamos en un Centro Comercial. Unos se tiraban en tobogán, otros saltaban desde lo alto de cabeza (a punto de romperse la misma) otros quitaban caballitos de goma a otros que intentaban montarlos, otros servían de colchonetas y otros de parachoques al final del tobogán, (menos mal que los niños son de goma...o no?) todo esto acompañado de gritos de exaltación, mientras los papás observaban lo "bien" que se lo está pasando su peque .-"Ahora llegamos a casa y cae rendidita!! Si no, no puedo descansar ni un rato" Le comentan al camarada de quedadas  infantiles...
Y mamá ahí.
Sin darse ni cuenta (o si) de que su niña esta angustiada llorando a moco tendido.

Pues qué quieren que les diga!! Que se hubiera comprado un hamster para verlo dar vueltas y encima ni lo tienen que bañar ni dar la cena ni contarles un cuento para dormir...porque todo esto, lo sabe hacer él solito.

En realidad, puede que la niña llorara por miedo, puede que lo hiciera por sentimiento de abandono, puede que fuera tímida y le diera pánico estar rodeada de niños...pero sobre todo puede que fuera porque su mamá no estaba cerca, cuidando de ella?

Todo esto da mucho que pensar.
Así que si veis niños llorar u os dicen: "no les pasa nada, así abren los pulmones, la vas a malcriar si vas corriendo en cuanto llora, te está toreando" etc etc..  recordad que no tenemos derecho a dejar llorar a un niño al igual que no dejaríamos llorar a nuestra pareja, amigo o familiar adulto, hasta incluso un desconocido y nos preocuparíamos por ellos.

Y sí, sí que pasa algo cuando lloran.

Atenderlos, cogerlos en brazos y darles muchos mimos (de esto hablaremos otro día, que también hay para un rato) y dejar sobre todo a un lado el adulcentrismo para preguntaros qué os está intentando decir ese pequeño.

Os dejo este enlace hacia un artículo que reunió en el 2004 a madres y padres, profesionales y cientificos y en definitiva, gente preocupada por el mundo que dejaremos a nuestros hijos, y que me parece super interesante para compartir.

Espero que os guste.

Declaración sobre el llanto de los bebés - Casilda Rodrigañez Bustos

lunes, 4 de marzo de 2013

Mami Mochi, Papi Pochi y MiniMó


Siempre he pensado que la persona con la cual habría de formar un hogar, debería reunir todas las cualidades necesarias para ser la definitiva.

Quizá por la infancia que viví, me hice esa promesa a mi misma [mis padres después de un tormentoso matrimonio del cual nacieron dos hijas tremendas de maravillosas, terminaron divorciándose 14 años después]

Soy tan romántica, que siempre he creído y creo en el amor, en la familia y en el buen corazón de las personas. Pienso también, que es muy importante el respeto hacia tus hijos, tu pareja y quien te rodea, individualmente de que en algún momento la vida quiera que se sigan distintos caminos.

Tal vez en eso pensemos todos, unos más que otros efectivamente, y a esto he de decir que también me planteé tener familia sin pareja en algún momento de mi vida, pero a casi todos nos gustaría que apareciera esa persona que nos acompañase siempre en nuestro trayecto, elegir tener hijos con ella ( y he dicho elegir, porque hay parejas que también elige no tener y es igualmente respetable) y envejecer juntos viendo a nuestra prole ya madurita y feliz y sentados en la terraza de algún bello lugar de retiro ir recordando cuán prósperos fueron nuestros años de juventud.

Segun leí hace algún tiempo, en mi libro favorito de Paulo Coelho, El Alquimista,  "Cuando una persona desea realmente algo, el Universo entero conspira para que pueda realizar su sueño. Basta con aprender a escuchar los dictados de su corazón"

Puede que por ese deseo tan fuerte de crear mi propia familia, el destino quiso desplazarme de mi ciudad natal a 100km de mi familia, separarlo a él de su tierra añorada a ni más ni menos 600km de la suya...eso sí, cada uno por su lado y con relaciones distintas, para ir aprendiendo mientras tanto...pero con un mismo fin, reunirnos a los dos, con el convencimiento mútuo de que ésta vez sería la definitiva y hacerlo en algún lugar de este planeta para dar lo mejor de nosotros mismos: Nuestro amor y el amor por nuestra hija. El corazón nos dijo que esta era la ocasión.

Tuvimos muy claro desde el principio el futuro de nuestra relación, tanto, que a los tres meses ya estabamos viviendo en pareja. A fecha de hoy 1 de marzo de 2013, nuestra relación ha vivido 7 maravillosos años juntos, con nuestros más y nuestros menos, pero siempre luchando por nuestra relación y manteniendo vivo nuestro amor.

No olvidaré nunca la ilusión de nuestros primeros dias viviendo juntos en los que decidimos tres cosas: abrazarnos siempre, siempre, siempre y sobre todo al llegar a casa, darnos besos al doblar las sábanas e intentar hablar después de habernos enfadado...porque también nos enfadamos, no es todo coser y cantar, como en toda buena casa de vecino.
Y si algo teníamos clarísimo fue que, tarde o temprano, decidiríamos ser papás...formar nuestra familia.

Y de nuestra aventura como papás iré llenando las páginas de este blog.

Típicamente, empezamos adoptando un perro. Con nosotros comparte su vida, desde hace ya casi tres años un precioso perrote, un Labrador Retriever,el cuál, se porta fenomenal con la pequeña. De hecho, elegimos la raza conscientemente del futuro como familia que nos esperaba, y acerté de pleno. Es cierto que en casa nos encantan los animales, y que perfectamente podríamos haber tenido cualquier perro, pero en su momento, tomamos esta decisión y lo queríamos a él.
Os preguntaréis por qué Mochi.
Pues bien, nos empezamos a llamar cariñosamente como casi todas las parejas con diminutivos. Porque ante todo, somos una pareja del montón, con todas nuestras normalidades que pueda tener cualquier pareja que conozcais.
El es mi polluelo y yo soy su mochuela...y de ahí viene....Mochi y Pochi
Aunque ahora nos hemos convertido en Papi Pochi, Mami Mochi y MiniMó

Con este blog quiero compartir mis inquietudes como madre, mis dudas y miedos, mis logros y los descubrimientos que he ido haciendo sobre lactancia, sueño, crianza, educación y familia que tanto me están sorprendiendo.... y sobre todo, quiero compartir la alegría de ver crecer a nuestra pequeña y observar cómo ha crecido aún más si cabe, mi amor como esposa de mi querido PapiPochi.
Te lo dedico a ti amore y a nuestra pequeña, por ser esa persona que reune todo lo que necesitaba para ser feliz.
Eres mi complemento directo.
Y a ella, porque si no fuera por ella, no me hubiera llegado la inspiración. Siempre me ha gustado escribir, pero nada me había motivado tanto a hacerlo como el ser madre.

Intentaré redactar lo más amenamente posible y con cierto sentido del humor, las anécdotas que sucedan en mi familia, y lo que de ésta nueva etapa de mi vida estoy aprendiendo, y compartiré con vosotros toda la información que llegue nueva a mis manos para saber vuestros puntos de vista.

Mi nombre es Carmen, y estoy muy ilusionada al empezar la aventura de este blog con todos vosotros, mamás y papás y todo aquel que me quiera leer.

Doy salida a MamiMochi me mima.